Asegúrate de que tu cabello esté limpio y preferiblemente húmedo (recién lavado con champú y acondicionado, y secado con toalla para eliminar el exceso de agua). También puedes aplicarlo sobre cabello seco si buscas un toque final de brillo y control del encrespamiento.

2. Dosificación

Vierte una pequeña cantidad de aceite en la palma de tu mano. Para cabello corto o medio, un chorro del tamaño de una moneda de diez centavos suele ser suficiente. Para cabello más largo o grueso, puedes necesitar un poco más. Empieza con menos y añade si es necesario.

3. Distribución

Frota tus manos suavemente para extender el aceite y calentarlo un poco. Luego, aplica el aceite desde la mitad del cabello hacia las puntas, prestando especial atención a las zonas más secas o dañadas. Evita aplicar directamente en el cuero cabelludo si tu cabello tiende a engrasarse fácilmente, a menos que tu objetivo sea tratar la sequedad del cuero cabelludo.

4. Masaje y Peinado

Masajea suavemente el cabello para asegurar una distribución uniforme del producto. Luego, peina tu cabello como de costumbre para desenredarlo y esparcir el aceite de manera homogénea. Esto también ayudará a que el producto penetre mejor.

5. Estilizado (Opcional)

Una vez aplicado el aceite, puedes proceder a estilizar tu cabello como de costumbre. Puedes secarlo con secador, dejarlo secar al aire, o usar herramientas de calor. El aceite de argán también proporciona protección térmica y puede ayudar a reducir el tiempo de secado.